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Somnolencia y Realidad Licántropa

 

       Eran las 10:10 y yo estaba escribiendo todos los recuerdos de este prolongado día, pensaba en cuanto más tiempo duraría aquí, y cuando he de determinar por mis recuerdo el quedarme o el irme, la mansión en sí parece resguardar conocimiento que los demás no logran encontrar, estaba angustiado por el mañana, sabía que habían muchas cosas a aprender, sabía que muchas luchas yo debía de confrontar conmigo mismo, pero recuerdo que eran tantos los pensamientos que cuando menos pensé quede dormido.

       Por un momento me desperté en otro lugar, escuchaba las bocinas de los autos y los muchos ruidos ocasionados por lanzamientos de botellas, o las llamas que consumían cosas que no sabía aun, tomé el reloj que tenía a mí lado y mientras que yo lo miraba vi que eran las 3am, en ese momento me levante y vi que ese lugar me era familiar, de alguna manera sentía que todo lo que viví en Bretford, realmente fue un sueño, pero aun así no recordaba de cosas pasadas, comencé por escuchar gritos por los pasillos cercados a la puerta de ingreso, me acerque a mi balcón y mire que muchos corrían desesperadamente como si algo malo hubiera ocurrido, observaba una ciudad entera que estaba casi completamente en llamas, y con personas alocadas que corrían de un lado a otro, buscando refugio, parecía ser que el mundo estaba colapsado en una apocalíptica situación, al mirar con desagrado y temor el panorama que me esperaba al salir, escuche como alguien golpeaba fuerte las puertas, diciendo:- Salgan de aquí, tenemos que escaparnos lo más rápido posible.

       Al abrir la puerta este hombre se acercó a mi muy asustado y tomándome de la mano me arrastraba hacia su dirección diciendo: - Tenemos que irnos, o va a ser muy tarde, van a cerrar las puertas del extranjero en una hora, tenemos que llegar cuanto antes. –

       -Que es lo que está ocurriendo- le dije a este hombre mientras miraba los pasillos llenos de sangre y restos de personas como si hubiesen sido descuartizadas

       -Hay una pandemia por causa de un virus que causa canibalismo y demencia, el virus se propago por todo el país, ahora tenemos que escapar antes que tiren una bomba aquí, y seamos fulminados. - Este hombre decía mientras bajaba rápidamente las escaleras

       Al seguirle con la misma rapidez, él me decía que uno de sus amigos pasaría a buscarnos en 5 minutos fuera del edificio, y que ya no podíamos volver para atrás, porque todo ya estaba organizado.

       Habíamos salido del edificio, y al mirar la desesperación que estaba por mi derredor, entre en shock por un momento al ver que alguien se arrojó del edificio y cayó frente de mí, por un segundo estaba tranquilo y ahora me hallaba en la loca agonía de mi gran desesperación, al aparecerse una camioneta nos dijo que subiéramos rápidamente, pero yo ante la parálisis de la ocasión, quede congelado mirando el cuerpo de ese hombre que se mató, pero aquel hombre que me llevo hasta ahí me dijo que le mirara y que reaccionara, al entender sus palabras reaccione y subí con él a la parte trasera de la camioneta, y mientras proseguía en su camino, vi como personas corrían tras de otras y las mataban, también vi a madres comer las gargantas de sus bebes, y muchas otras cosas que no podría dar descripción por lo horripilante que eran.

       Alguien se hecho sobre la camioneta, intentado de alguna manera atacarnos, su boca estaba repleta de sangre, y sus ojos eran completamente negros y sus gritos eran como el gemido de cerdos, uno de los hombres que se hallaban con nosotros la mato, mientras que comenzaron a aparecer más y más en el camino al tirarse de los edificios en dirección a la camioneta, hubo un niño que se lanzó sobre mi intentándome morderme, y ante la desesperación mis oídos fueron aturdidos por el disparo de uno de los que se hallaban con nosotros, el conductor estaba pasando por encima de muchos de los infectados que se encontraban por el camino.

       Sentí pérdida de audición por las muchas granadas y disparos que se hacían, de modo que, al debilitarse mi visión, me levante exhaustado y me halle de nuevo en la habitación de Mansion Bretford, solo lo que viví fue un sueño, mi realidad era esta, el seguir encarcelado en esta mansión por el proseguir de muchos días, o tal vez años. Al mirar en dirección de la puerta, vi como si por fuera estuviera el suelo con humo, intentando ingresar lentamente en la habitación. 

       Levantándome, camine hacia la puerta lentamente sin que Azrael me viera, y al abrirla, vi que todos los pasillos se hallaban cubiertos de este humo que cubrían tan solo los pies, al seguir en dirección de donde se aproximaba este humo, vi que el mismo no provenía del bosque, sino que era como si alguien lo estuviera provocando de alguna parte, al ver que eran las 3 am, sabía que nadie se hallaría despierto en estas horas, pero de alguna forma no me parecía nada normal este humo rodear casi todo los pasillos por los que caminaba.

       Estaba caminando silenciosamente para no llamar la atención de quienes se ocultaban, pero al llegar a donde se encontraba el Espejo de Nogament, en el Noreste de Aclidias en el Letrado B, vi que una enorme criatura de aspecto loborifico y muscularico de unos 5 o más metros de altura, ingresaban a esa Sala, al ver su aspecto me sorprendió que no tenía miedo al observarlas, reacción que era de no explicar, pero al seguirle el rastro por donde ingreso, vi que con él se hallaban 2 más, ellos tenían las mismas lucientes filtraciones que repercutían en latidos con un luminar esplendido, ellos eran los mismos que vi en el bosque y los que mencionaba Gavrilo en aquella ocasión. Desde entonces me di cuenta de que lo visto aquella vez era real y no una alucinación, pero en mi mente me preguntaba - ¿Qué seres serán? - ¿Por qué razones se dan a mostrar como lo hicieron en aquella vez? - ¿Qué función cumplirán estos seres al ingresar aquí? - muchas preguntas pasaban por mi mente, pero el seguirles con mis ojos lo que ellos hacían, me llevaba a saber de a poco la razón de su visita a Bretford.

       Uno de ellos en el lado derecho, tenía un incensario que colgando en cadenas provocaba en su mover el expulsar de ese humo, que parecía ser el medio de adormecer a todos los residentes en Bretford, en el lado situado de su corazón se filtraba la deleitable fluidez de un elixir morado que parecería no dejar de moverse.

       El Ser loborifico que estaba en medio, tenía filtraciones de diferentes colores, mientras que el de su lado izquierdo, su filtración era de color verde, ellos ingresaron por un lugar que al parecer nadie sabe que es para ingresar, como si fuera una sala secreta, yo escondiéndome detrás de las cortinas, miraba su ingresar por medio de este ser del lado medio, que ingresaba la llave que poseía en su cuerpo como collar, en una pared que se hallaba cubierta de un cuadro de gran inmensidad, el ser de corazón verde tomo con sus manos ese cuadro corriéndolo a su costado, dando el paso a que este otro ser ingresara esa llave y se abriera al lugar al cual ellos querían llegar a proseguir.

       En ese momento comenzó a sonar mi Brasalock de Enfidias, porque me hallaba bastante lejos de Azrael, al escuchar ese sonido, estos seres volvieron para ver quien estaba en el pasillo, y al verme intentándolo apagar, se pudieron delante de mí con la mirada de sus ojos de una manera como si el universo estuviera en su mirada, ante el pánico del miedo por ver su animalística apariencia, quede paralizado y al ver que uno de ellos comenzó a envolverme con el humo que estaba en el suelo, hasta nublizar mi cuerpo y mis ojos, al verse desaparecer lentamente la niebla, me halle solo en la Sala como si nada hubiera pasado, de modo que en pocos minutos apareció Azrael, que reprendiéndome, me dijo que hacía en ese lugar, pero yo confiado de lo que había visto, no quise mencionarle a él, ya que podía de alguna manera ser considerado demente como todos lo consideran a él.-

       Lo único que llego a pensar Azrael en ese entonces es que yo era sonámbulo, y que el Brasalock de Enfidias me había despertado de ese estado anormal de sueño en el que uno se levanta, anda y habla y realiza ciertos actos que no recuerda al despertar.

       Al llegar a mi habitación y sacarme la ropa tras sentir una gran comezón, miré mi espalda en el espejo, y vi que tenía en ella, un dibujo de trazos finos con pequeños círculos en la parte alta dando la forma de un árbol, en ese momento asustando dije: - ¿Qué es esto? -

       -Eso es un sistema de digitación arbolizada, no es un tatuaje de algo virtual, sino que es un circuito de ordenador impreso, que dura tan solo 2 años y desaparece, es una forma de identificarte que eres parte de la membrecía Bretford, pronto recibirás cuando dejes de ser Neofito un símbolo Divisor de Bretford Laf en la muñeca izquierda, así que vete a dormir porque tengo sueño y no nos queda mucho tiempo para descansar.- Azrael de espaldas en la cama

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